Hay una razón por la que los juegos de azar se han mantenido a lo largo de la historia como un pasatiempo popular y universal. Como juego de azar, sigue siendo muy emocionante y mantiene a los jugadores entretenidos mientras esperan con impaciencia a ver si finalmente les toca el premio gordo o no. Y no se trata sólo de grandes premios, también importan los pequeños momentos de suerte. El misterio de no saber es la razón por la que las apuestas son tan divertidas. Pero para algunas personas, este placer puede ser potencialmente perjudicial si desencadena tendencias compulsivas. Para evitarlo, hay que aprender a jugar de forma responsable.
¿Qué es el trastorno por ludopatía?
Cuando las personas desarrollan un deseo irresistible de jugar, los médicos se refieren a esta afección como trastorno del juego. A diferencia del mero disfrute de los juegos de casino, el trastorno del juego puede ser perjudicial para el individuo, ya que pone en peligro su salud mental, física y financiera.
Aunque es diferente del abuso de sustancias, el trastorno del juego se parece en muchos aspectos a una adicción. El motivo es la liberación de dopamina que puede provocar el juego. La dopamina es una hormona que desempeña un papel fundamental en el sistema de recompensa del cerebro, por lo que el cuerpo interpreta su liberación como una buena sensación.
A algunas personas les gusta tanto el subidón de dopamina que les produce ganar en los juegos de casino que se vuelven psicológicamente dependientes de ello. Otros aspectos de su vida pueden verse afectados, con síntomas físicos y mentales, pero las personas con esta afección siguen sintiendo que no pueden dejar de jugar.
Cómo prevenir la ludopatía
Aunque no existe un método a prueba de balas para detener la ludopatía, y de todos modos no todo el mundo se verá afectado por ella, detectar la afección lo antes posible puede mejorar drásticamente las probabilidades de vencer la dependencia de los juegos de casino.
Algunos de los síntomas a los que debe estar atento son:
- Pensar en el juego muy a menudo, hasta el punto de que los pensamientos sobre el juego se sienten intrusivos e imparables.
- Saltarse citas e incumplir plazos para seguir jugando en los casinos.
- Mentir sobre sus hábitos de juego a amigos y familiares y/o discutir con ellos por ello.
- Síntomas de depresión y ansiedad, como alteraciones del sueño, cambios de humor, cambios de peso y apetito, etc.
Aunque el trastorno de ludopatía puede parecer diferente para cada persona, estos son síntomas comunes que suelen indicar que una persona está desarrollando hábitos de apuestas compulsivas. Si ese es su caso o el de un ser querido, consulte los siguientes recursos para obtener más consejos sobre cómo gestionar esta afección:
Recuerde que si se da cuenta pronto de estos síntomas y actúa de inmediato, podrá limitar los daños y recuperarse más rápidamente. Incluso si no padece ludopatía, puede ser una buena idea seguir estos sencillos consejos para jugar de forma responsable:
- Utiliza alarmas y recordatorios para limitar el tiempo que pasas en los casinos.
- Fija límites presupuestarios de antemano y cíñete a ellos.
- Si desea dedicar más tiempo al juego que le gusta, juegue a la demo en la que no apuesta dinero real.
- Compruebe si el casino en línea de su elección dispone de otros medios y funciones para prevenir la ludopatía.